En este proyecto, colaboramos con Unilever para rediseñar su modelo de control de stock, optimizar su estructura operativa e integrar sistemas tecnológicos desde los operativos hasta los analíticos. Logramos visibilidad operativa en 360°, un inventario más preciso, trazabilidad total y ahorros logísticos sostenibles.
El desafío

El cliente enfrentaba una operación compleja con diferencias diarias de inventario, procesos no integrados y una estructura poco alineada con los niveles de exigencia del negocio.
Do Better realizó un levantamiento completo de sus procesos logísticos, identificando oportunidades en distribución, stock y abastecimiento. Se evidenció la necesidad de una nueva estructura organizacional, integración tecnológica entre SAP y WMS, y un sistema de control en tiempo real.
Las metas estaban claras: mayor precisión, trazabilidad completa y reducción de costos asociados a bodegas externas.
Diseñamos un plan de trabajo en tres etapas, cada una construida en conjunto con el cliente.
Primero, rediseñamos los procesos de control de stock y definimos una nueva estructura organizacional. Se incorporaron roles clave para el seguimiento, análisis de datos y gestión operativa. Esto permitió tener control sobre los entregables y su periodicidad, alineados con cada área funcional.
Luego, desarrollamos una plataforma de conciliación entre SAP y WMS. Esta herramienta automatizó la gestión de inventarios, permitió trazabilidad completa y generó alertas sobre diferencias y desvíos. Se eliminaron tareas manuales y se habilitaron dashboards en Power BI para tomar decisiones con datos confiables y en tiempo real.
Finalmente, establecimos reglas claras de operación: niveles de servicio, flujos de aprobación, indicadores clave (KPI/KPR) y protocolos para ajustes, decomisos y donaciones. Todo el modelo fue documentado y quedó bajo la responsabilidad operativa de nuestro equipo, con seguimiento continuo y sostenido.
La Solución

El Resultado
La implementación permitió una transformación total del área de control de stock.
Se redujeron las diferencias físicas de inventario de más de 120.000 cajas diarias a solo 4.000. El indicador de precisión (IRA) alcanzó el 99,90 %, muy por sobre el 96,36 % inicial. También se cerraron bodegas de overflow y se redujeron los costos logísticos por almacenamiento externo.
El cliente adquirió la capacidad de tomar decisiones basadas en datos confiables, actualizados y trazables.
Hoy, cuenta con una operación más eficiente, controlada y preparada para los desafíos futuros.

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